El tipo tiene cara de surfista, es australiano, puede derribar a cualquier chica. Pero le gusta que le follen los tíos de vez en cuando. Pensó que tendría una buena oportunidad con Pablo Bravo. ¡Pero ahora va a ver lo que es que le den "Bravofucking"! ¡Cuando Pablo Bravo se convierta en el Cabrón Bravo, se pondrá en celo! Y este australiano va a pagar el precio. Entre los brazos musculosos del macho tatuado, pierde el control y se siente como una virgen siendo desflorada. ¡Está claro que va a sentir al gran gordinflón latino pasar! Bravo lo pulverizará y le mostrará quién es el jefe. Esto hará a este australiano sumiso y le hará pedirlo una y otra vez.